Yo, padre, ¿cómo participo en la crianza de mis hijos?

Acciones cotidianas hacen la diferencia

Anteriormente hemos hablado de los beneficios para tus hijas e hijos cuando te involucras activamente en su cuidado y educación con la crianza compartida, pero, ¿cómo hacerlo?, ¿qué puedes poner en práctica para lograrlo?

 

Romero se casó con Mara cuando aún no terminaban la carrera, él es ingeniero civil y ella pedagoga, tienen tres hijos y esperan al cuarto. Por su trabajo, Romero muchas veces debía viajar por periodos largos de tiempo y por lo que se perdió el nacimiento de su primer hijo, las primeras palabras del segundo y todo el embarazo de Mara cuando iba a llegar su tercer bebé. Ahora que llegará el más pequeño de la familia, pidió un permiso especial para estar más cerca de su bebé.

 

A pesar de tener más hijos, Romero no ha estado muy involucrado en su crianza y educación así que necesita algunas pistas de cómo puede participar. Es por ello que se nos ocurrió escribir este post, así, si estás en la misma situación, puedes echar un vistazo a estas recomendaciones:

  1. Recién nacido, el bebé generalmente está al resguardo de su madre, sin embargo, cosas como cambiarle el pañal, arrullarle, lavarle sus pañaleros o, de ser el caso, preparar y darle la fórmula, son cosas que puedes hacer. Con esto, además de crear un vínculo con la o el pequeño, le das la oportunidad a tu pareja de que descanse, se dé un baño relajante o lo que sea que necesite hacer.
  2. Léele cuentos, cántale, enséñale tu música favorita, dibujen, armen rompecabezas, muéstrale lo linda que puede ser la naturaleza, vigílalo mientras explora el entorno, jueguen… ¡las opciones son infinitas! El punto es que a través de actividades como éstas estimules sus sentidos y su desarrollo.
  3. Ayúdale con sus tareas y resuélvele todos los porqués que te pregunte; vuélvete una figura a la que pueda recurrir cuando necesite ayuda, esa confianza será muy valiosa cuando esté en su adolescencia.
  4. Estimula su autoestima, ¿cómo puedes hacerlo?, una forma es aplaudiéndole sus logros, ¿pudo amarrarse las agujetas sin ayuda? Felicítala o felicítalo. ¿Sacó un 10 en matemáticas? Dile que estás orgulloso. ¿Mantuvo el equilibrio en la bici? Celébraselo.
  5. Para estar presente en su crianza, también puedes realizar algunas tareas del hogar. Por ejemplo, prepararles el desayuno o la cena, plancharles el uniforme los domingos por la noche, ir al mercado por los snacks saludables o peinarles antes de salir de casa.

Sumado a esto, platicar con tu pareja, establecer límites y respetar acuerdos, será la clave para que tu participación en la crianza de tus hijas o hijos, dé como resultado, niñas y niños felices, sanos y seguros. 

Cuéntanos, ¿tú cómo compartes y educas a tus hijas e hijos?

 

Queremos leerte.