¿Y si fuera testigo de agresión?

Quisiera contarles lo que me ocurrió. Desde que retomé el trabajo, salgo quince minutos antes para que el Metro no esté saturado. Así que los pasillos estaban libres y escuché gritos.

 

Del otro lado del andén pude ver que una mujer le gritaba a otra. No quise parecer entrometida, por lo que vi hacia otro lado; sin embargo, los gritos continuaban.

Desde donde estaba, alcancé a ver que la mujer más tranquila caminaba hacia donde yo estaba, pero la otra la seguía con el mismo tono violento.

 

Conforme se alcanzaban comencé a entender algunos de sus gritos.

 

-¡Nos vas a contagiar, inconsciente!

 

Por fin reconocí el uniforme. No podía hacer demasiado, corrí al pasillo a buscar a un policía.

 

Afortunadamente, el personal llegó a tiempo. Me esperé para ver si necesitaban algo y para declarar, pues es importante denunciar actos de violencia.

 

 

Ante los cambios actuales, podemos encontrarnos con situaciones violentas en el espacio público, de acuerdo con David Lee, lo mejor es:

  • Protégete. Nunca estés en riesgo
  • Observa detalles. Si puedes, conserva la imagen del agresor
  • Busca ayuda. No podrás detener el acto, pero puedes avisar a las autoridades
  • Si no te pones en peligro, espera a saber si existirá denuncia.