Beneficios del respeto en la relación con nuestras hijas e hijos

Mamá y papá podemos fomentar relaciones sanas

Cuando era joven no entendía muchos de los actos de mis padres, pero ahora que yo soy mamá, comprendo todo aquello que me parecía raro. Déjame te cuento: mi hijo mayor tiene 17 años, está en la llamada “edad de la punzada”, y comenzamos a tener conflictos. Ante ello, recurrí a mis padres, porque no sabía cómo hacerle con él, así que un día, mientras nos echábamos la tacita de café luego de la comida, nos pusimos a platicar y me dieron el mejor consejo de todos:

 

El respeto como pilar de la relación con nuestras hijas e hijos.

 

Este valor es fundamental para que ellas y ellos  a prendan que para convivir es indispensable respetarse y respetar a los demás, además de que abre una puerta para que toda la relación sea de esa forma, ya sea para comunicarnos, marcar límites y hasta refuerza la confianza y cariño entre ellas o ellos y nosotros. También recuerda que aprenden de nuestro ejemplo como mamás o papás, así que todo empieza ahí.

Al respetar la relación con nuestras hijas e hijos, se generan algunos beneficios, como son:

“El respeto como pilar de la relación
con nuestras hijas e hijos. “.

El respeto como pilar de la relación con nuestras hijas e hijos.

  • Abre las puertas para la comunicación, ya que ellas o ellos sabrán que podrán hablar contigo porque respetas sus ideas y los escuchas.
  • Genera confianza, pues tu hija o hijo va dirigirse contigo con mayor apertura, sólo recuerda establecer límites para que no se confunda ni trate de bromear contigo de más.
  • Crea participación activa, ya que una vez que enseñamos a nuestras hijas e hijos el respeto ante cualquier cosa, verás que es más fácil que tengan responsabilidades en casa, es decir, en lugar de decirles “siempre dejas un tiradero”, diles “por favor, recoge los juguetes o cosas que usaste cuando hayas terminado”. Si te diriges con respeto a ellas o ellos, las cosas cambian.
  • Produce reciprocidad, porque tus hijas e hijos entenderán que este valor tiene que ser mutuo. ¡Nadie puede ser tratada/o irrespetuosamente!

Recuerda que, así como nosotros (mamás o papás) pedimos respeto, también debemos respetar a nuestras hijas e hijos así tengan 2, 10 o 20 años. Asimismo, no está de más mencionar la importancia de establecer límites y comunicarnos asertivamente con ellas y ellos.

Tú, ¿ consideras que tienes una relación de respeto con tu hija o hijo?, -déjanos tus comentarios en nuestras redes sociales.